El crecimiento económico de los países desarrollados ha dado origen a lo que se conoce como Cuarto Mundo, un término que engloba a todas aquellas personas que residen en los países más desarrollados, pero se encuentran excluidas o en riesgo de exclusión social. Esta situación se produce porque la riqueza se distribuye de manera desigual y la línea que separa a ricos de pobres se convierte en abismo.
El Cuarto Mundo es un pueblo formado por hombres, mujeres y niños que, generación tras generación, se ven excluidos de los derechos fundamentales de los que goza el resto de la sociedad. Se ven excluidos de los progresos sociales y de la participación en la vida asociativa, política, religiosa, cultural, sindical... de sus sociedades. No se cuenta con ellos como interlocutores sino, como mucho, como meros beneficiarios de ayudas".
¿Pero cuál es la principal característica de este denominado Cuarto Mundo? Lo más curioso es que surge dentro de lo que se conoce como Primer Mundo. Es en los países más avanzados donde la gran diferencia en el reparto de la riqueza da lugar a dos grandes grupos que ocupan un mismo espacio físico, pero no social. No son casos aislados.
La pobreza siempre ha estado presente en nuestra sociedad. Siempre han existido ricos y pobres. Pero desde hace unos años es cuando esta diferencia se hace más patente. A medida que la economía del mundo occidental ha ido creciendo, también ha aumentado el número de personas a las que esta riqueza no llega. Se tiende a pensar que los más pobres viven en los países del Sur. Sorprende reconocer la pobreza 'al lado de casa', pero la hay. En todos los países hay pobres, que son los que menos medios tienen para salir adelante. Con la actual crisis económica que atraviesa nuestro país, este colectivo de personas empobrecidas que viven en el primer mundo sigue aumentando.